lunes, 22 de noviembre de 2010

Ojito...


Ojo...yo estaba en Oviedo, en la casa familiar precisamente a las faldas del Naranco, y vi pasar aquel dia a Zülle y Rominger como obuses......aquel día fue, a pesar de un final suave como el Naranco, una de las jornadas más míticas de la Vuelta en los últimos 20 años, con un ambiente de público que haria parecer la Bola del MUndo un entierro de monjas de clausura....Fat Balbás iba pegando unos claxonazos bestiales, pegando puñetazos desde el coche a los borrachos que le asaltaban y le movian el coche....los gritos de HIJO PUTA iban en todas las direcciones....encima, justo antes o después del coche de Balbás iba el Butano, montando un lío bestial a su paso....fue un dia tremebundo, con los estudiantes sin clase de tarde, la gente habia bebido sidra a lo bestia y comido chorizos a la sidra en cantidades industriales, Rominger corría para CLAS, el equipo de la tierra, y, bueno, el ambiente era infernal......para lo bueno y para lo malo....aquello estaba plagado de energúmenos...joder, era un ambiente perfecto para Bahamontes...aquel dia federico hubiera metido 8 minutos al segundo en la etapa....había lluvia, los tios venian quemadísimos, con la cara oscura, manchados, algunos con culottes rotos......en las cuentas habia cajas a mansalva de sidra, energúmenos tocando la gaita en la curva de San Miguel de Lillo....un ambiente delirante que no es nada (a finde cuentas en Oviedo son unos blandengues señoritos....) comparado con la que se liaría en un etapón copolillesco astur, con mineros exaltados, paisanus con el garabatu de ir a la yerba a cuestas en la cuneta, zorros y raposus colgados de las pancartas de la montaña por haber intentado entrar en el gallinero....se podría montar la de Dios en un ambiente irreal, casi de Giro de Coppi y Bartali...

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